▷ ¿Qué es la optometría comportamental y para qué sirve?

La optometría comportamental es una especialidad que puede ayudar a las personas a mejorar su visión y sus habilidades visuales, lo que puede tener un impacto positivo en el rendimiento académico, deportivo y laboral, pero más allá de todo eso, puede tener un impacto incalculable, para bien, en la calidad de vida de todas ellas.

Cada año y medio, o cada dos años como máximo, las personas deberían visitar una buena óptica Málaga para realizarse una revisión de optometría. Esto, para poder identificar a tiempo distintas patologías, poder encontrar soluciones más eficaces y, por supuesto, para prevenir que muchas incidencias se terminen convirtiendo en graves enfermedades.

Dentro de la optometría, la optometría comportamental es una especialidad que se centra en cómo el cerebro procesa la información visual. Es decir, que va más allá de los estudios de agudeza visual, porque se adentra en el estudio del movimiento, el enfoque, la coordinación de los ojos y, por supuesto, de cómo toda esa información es procesada por el cerebro para garantizar una visión correcta.

¿Qué busca?

La evaluación de optometría comportamental siempre se llevará a cabo en una optica optometrista de primer nivel, y generalmente incluye:

Examen de la vista, para evaluar la agudeza visual, la coordinación ojo-mano y la percepción espacial del paciente.
Pruebas diseñadas específicamente para cada paciente, que tienen por objetivo evaluar habilidades visuales puntuales, entre las que se pudieran señalar la fijación, la convergencia o la acomodación.
Diagnóstico y terapia visual.

Una vez realizado todo lo anterior, es importante comprender para qué sirve, para denotar la importancia de este campo de la optometría. Y es que la optometría comportamental puede llegar a ser muy útil aportando soluciones específicas:

Lectura y aprendizaje: esta especialidad puede ayudar a niños y adultos con problemas de dislexia, TDAH, fatiga visual, saltos de línea o dificultad para comprender lo que leen. Por lo tanto, se pueden establecer terapias que permitan corregir esos problemas, y con ello, mejorar la retención de lo que se lee, la comprensión, y por ende, el aprendizaje.
Rendimiento deportivo: estos estudios suelen realizarse mucho en el deporte de alto rendimiento. La razón es que puede ayudar a los atletas a mejorar la coordinación ojo-mano, la velocidad de reacción y la percepción espacial.
Fatiga ocular: puede ayudar a aliviar síntomas como dolor de cabeza, ojos llorosos, visión borrosa y mareos al usar dispositivos digitales o pasar muchas horas del día en espacios cerrados, donde la visión a áreas lejanas no es posible.
Calidad de vida: puede ayudar a mejorar la autoestima, la confianza en uno mismo y la capacidad para realizar actividades cotidianas, que al final del día, es un gran logro en sí mismo.

Casos en los que la optometría comportamental es fundamental

Desde luego, la prevención de problemas de salud y la tranquilidad de las personas son razones suficientes para someterse a pruebas de optometría comportamental en una buena óptica Málaga centro. Sin embargo, hay casos concretos donde se recomendaría hacerlo:

Niños con dificultades de aprendizaje: porque a veces el niño tiene problemas para leer, escribir o concentrarse en la escuela, y la optometría comportamental puede ayudar a identificar si hay algún problema visual que esté interfiriendo con su aprendizaje. Suele ser más común de lo que se pudiera creer.
Adultos con problemas de visión: en casos en los que se experimenta fatiga ocular, dolores de cabeza o visión borrosa, la optometría comportamental ayudará a encontrar la causa del problema y mejorar la visión.
Personas que practican deportes: para un atleta que busca mejorar el rendimiento en la disciplina que practique, la optometría comportamental puede ser una gran herramienta para ayudarle a optimizar su sistema visual. El cambio en el rendimiento, a juzgar por la evidencia científica, suele ser muy considerable.

La calidad de vida y el rendimiento en las distintas áreas de la vida muchas veces tiene que ver con la salud y el funcionamiento adecuado de todo el cuerpo. La salud visual tiene mucho que decir en ese sentido.