Callos en los talones

cuáles son las causas de los callos en el talón

Los huesos tienen una alineación particular que les permite trabajar eficazmente. Cuando no están en la posición correcta, o no tienen el tamaño adecuado para mantenerse alineados, pueden causar pequeños bultos o protuberancias que conducen a problemas mayores, como los callos del talón.
Un callo del talón, también conocido como callo plantar, es la dolorosa acumulación de piel debajo de una de las cabezas de los metatarsos. Se desarrolla cuando un metatarsiano es ligeramente más largo o está más bajo que los demás. Esto hace que la cabeza ósea sobresalga ligeramente y absorba más presión que las demás a su alrededor. Con el tiempo, la fricción que se produce allí puede hacer que la piel se engrose.
Aunque el cuerpo crea este punto grueso para protegerlo de la presión, la capa extra allí puede ser contraproducente y aumentar la tensión sobre el hueso, especialmente cuando se está de pie o se camina. Esto hace que pasar tiempo de pie sea doloroso.
Normalmente la lesión es visible, pero no suele tener bordes definidos. La piel acumulada tiene un aspecto marrón o gris, aunque también puede ser roja. A veces se tiene la sensación de estar caminando sobre una piedra. Dado que el problema subyacente es óseo, la afección empeorará cuanto más tiempo pase sin ser tratada.

fotos de los callos plantares

Los talones secos y agrietados no sólo pueden ser antiestéticos, sino que a menudo pueden ser una fuente de dolor y vergüenza. La buena noticia es que se pueden conseguir unos talones suaves como los de un bebé con un poco de esfuerzo y la ayuda de su podólogo. La mayoría de los talones agrietados se pueden tratar en casa, pero para obtener los mejores resultados, nuestros podólogos pueden eliminar la piel muerta de sus pies en tan sólo 30 minutos, dejándolos suaves, lisos y listos para las sandalias.
¿Qué son los talones agrietados? Los talones agrietados son causados por el agrietamiento o la división de la piel. Cuando la piel alrededor de los talones se engrosa o se seca, pierde su flexibilidad y elasticidad, y puede romperse bajo presiones sencillas como las que se producen al caminar. Esto puede dar lugar a unos talones agrietados antiestéticos y dolorosos, e incluso sangrantes. Esto puede empeorar en personas que tienen una gran almohadilla de grasa en la planta del pie, que bajo presión requiere más elasticidad en la piel para expandirse sin agrietarse. Otras causas de aumento de la presión son la permanencia prolongada de pie, el embarazo o el exceso de peso.

callos plantares

Los callos, las callosidades y los talones agrietados son tres problemas comunes que tenemos el privilegio de ayudar a nuestros pacientes sobre una base diaria aquí en My FootDr. Por desgracia, son a menudo un problema que muchos ignoran con la esperanza de que van a desaparecer por sí mismos – mientras que en realidad puede empeorar si no se trata. La buena noticia es que el alivio de las molestias de estas condiciones puede ser simple y fácil – y completado en una cita. Hoy en día, el equipo de My FootDr está compartiendo por qué usted puede estar desarrollando cada uno de estos problemas, cómo se puede tratar hoy en día, y lo que puede hacer para evitar que se repitan en el futuro.
La causa principal de las callosidades y los callos es la presión y la fricción. Cuando una zona de la piel de los pies está expuesta a un roce repetitivo o a un exceso de presión, a menudo por caminar o por un calzado apretado, la piel empieza a endurecerse como respuesta. En realidad, se trata de un mecanismo de protección para evitar roturas en la piel. Por supuesto, hay otros factores que pueden contribuir a la presión, entre ellos:
Mientras que un callo es una zona más amplia de piel dura que se acumula en las zonas de los pies que soportan peso, los callos se describen mejor como pequeños puntos de presión en los que la piel dura se profundiza en una forma casi cónica. Esto puede dar la sensación de estar caminando sobre un guijarro, ¡y ser muy doloroso! Tanto los callos como las callosidades pueden variar en tamaño y grosor, lo que está directamente relacionado con la cantidad de presión a la que están expuestos.

callo en el talón por caminar

Una ampolla es una zona de piel elevada con un líquido acuoso en su interior. Las ampollas se forman en las manos y los pies por el roce y la presión, y se forman con bastante rapidez. Pueden salirte ampollas en los pies el mismo día que te pones un calzado incómodo o que no te queda bien. Pueden salirte ampollas en las manos si no llevas guantes de protección cuando haces cosas como usar un martillo o montar en bicicleta.
Un callo es una zona de piel gruesa. Los callos se forman en lugares donde hay mucho roce repetido durante un largo periodo de tiempo. La piel se endurece por la presión con el paso del tiempo y acaba por engrosarse. Adquiere una superficie dura y resistente, de color grisáceo o amarillento, que puede tener un tacto desigual.
Los callos en las manos no suelen doler y pueden facilitar que la persona realice la misma acción una y otra vez. Los callos pueden ayudar a los gimnastas a actuar en las barras paralelas desiguales y a los guitarristas a seguir tocando las cuerdas.
¿Pero qué pasa con los callos en los pies? Pueden ser dolorosos porque los estás pisando todo el tiempo. Los callos en los pies suelen formarse en el pulpejo del pie (la parte redondeada de la planta del pie, justo detrás del dedo gordo) o en la parte exterior del dedo gordo o del pequeño, o en el talón.

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