▷ Banco de españa interior | Actualizado noviembre 2024

banco de españa de oro

En 1844 se crearon los competidores Banco de Isabel II y Banco de Barcelona, seguidos en 1846 por el Banco de Cádiz. En 1847, a raíz de la sobreexposición en el malogrado mercado inmobiliario de Madrid, el Banco de Isabel II se fusionó con el Banco de San Fernando, conservando este último nombre.
En 1936, se transfirieron 510 toneladas de reservas de oro a la Unión Soviética (en un acontecimiento conocido como el oro de Moscú) correspondientes al 72,6% del total de las reservas de oro del Banco de España. Ese oro permaneció allí durante la Guerra Civil española.
En 1946, el gobierno del general Franco puso el banco bajo un estricto control. Fue formalmente nacionalizado en 1962. Tras el restablecimiento de la democracia a finales de los años 70, el banco inició una serie de transformaciones y modernizaciones que continúan hasta hoy.
El Gobernador del Banco de España es nombrado formalmente después de que el Presidente del Gobierno de España lo haya designado por el monarca español. El Gobernador debe ser un ciudadano español reconocido por su competencia en materia monetaria o bancaria. Cuando se nombra un nuevo Gobernador, el Ministro de Economía y Hacienda, de acuerdo con el procedimiento establecido por el Congreso de los Diputados, informa a la comisión parlamentaria competente. El actual Gobernador es Pablo Hernández de Cos.

dirección del banco de españa

DescripciónInformaciónEl Banco de España es uno de los más bellos ejemplos de la arquitectura española del siglo XIX. Revestido de abundantes elementos decorativos, el edificio fue uno de los premiados en la Exposición Nacional de Bellas Artes de España de 1884. El Banco de España se construyó para dotar al Banco Nacional de una sede más adecuada a las importantes funciones que desempeñaba, entre ellas la emisión de monedas y billetes para todo el país.
El proyecto fue adjudicado a los arquitectos Eduardo de Adaro y Severiano Sainz de la Lastra. Es un edificio ecléctico, en el que destacan las fachadas, con elementos de estilo clásico. Se complementan con las puertas y rejas de estilo francés. Las fachadas se unen en la esquina achaflanada que contiene la entrada principal y destacan por sus sobrios zócalos, que sirven para realzar la sensación de solidez que da esta institución. En el interior destacan la escalera y el patio, que hoy alberga la biblioteca. La monumental escalera de mármol de Carrara es un excelente ejemplo de la arquitectura tradicional española, diseñada por los arquitectos del banco y ejecutada por Adolfo Areizaga. Está presidida por una serie de vidrieras de la empresa alemana Mayer, realizadas en estilo simbolista y que incorporan numerosas figuras alegóricas en sus diseños.

bóveda real del banco de españa

La valoración de Jurys: La sala que fue el núcleo del primer edificio del Banco de España ahora utilizado como biblioteca recupera su esplendor original a través de esta intervención, que aumenta aún más si cabe su condición de piedra de toque dentro del laberíntico conjunto de edificios gracias a acertadas decisiones que refuerzan su luminosidad y transparencia. El equilibrio entre el lenguaje y los materiales contemporáneos y la arquitectura original es consecuencia de la precisa integración de nuevos elementos funcionales, mecánicos y espaciales que las intervenciones anteriores habían devaluado. El jurado valora la intensa implicación de su autor en una actitud a la vez respetuosa y comprometida: estricta e inflexible en la preservación de sus valores arquitectónicos y radicalmente contemporánea en el lenguaje aplicado a las modificaciones necesarias para cumplir con su funcionalidad actual.
La sede principal del Banco de España es un edificio lineal paralelo al Paseo del Prado que gira en diagonal, en la esquina del chaflán de la Plaza de Cibeles. Dentro del eje del chaflán y en sus inmediaciones se encuentra la antigua planta comercial, actualmente sala de lectura de la biblioteca que fue objeto de esta restauración. El espacio tiene una triple altura en la parte central y una cristalera con luz de techo en la parte superior. Conserva intactas las celosías de hierro fundido y la estructura metálica, que fueron ejecutadas en la localidad de Mieres por Bernardo Asins.

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Las primeras juntas generales de accionistas del Banco de San Carlos se celebraron en el palacio propiedad del Conde de Altamira mientras se terminaban las obras de la primera sede del Banco en el Palacio de Monistrol, en la calle de la Luna de Madrid.
Sólo se presentaron cuatro proyectos, ninguno de los cuales satisfizo plenamente a la comisión de obras. Por ello, los arquitectos del Banco, Sainz de la Lastra y Adaro, tras estudiar los edificios de otros bancos europeos, elaboraron ellos mismos el proyecto definitivo, que fue aprobado a finales de 1883.
Esta ampliación se basó en el proyecto presentado por el arquitecto del Banco, José Yarnoz Larrosa, que proponía ampliar la fachada, repitiendo el diseño exterior del edificio existente y limitando al interior las innovaciones arquitectónicas de la época.
La segunda ampliación de la sede de Cibeles se inició en 1969, a partir de un proyecto diseñado por Javier Yarnoz Orcoyen, hijo del arquitecto responsable de la anterior reforma. En esta fase, el edificio del Banco se amplió a lo largo de las calles de los Madrazo y Marqués de Cubas.